En los últimos años la presencia de las empresas, en el mundo digital y por tanto en redes sociales, ha aumentado vertiginosamente ya sean pequeñas, medianas o grandes. El aumento de dicha presencia online ha crecido tanto que si introducimos una búsqueda en Google y no figura ningún resultado, tenemos la firme sensación de que no existe. Y esto lo saben los partidos políticos, los cuales no quieren pasar inadvertidos entre la audiencia y mucho menos en época de campaña.

Ayer se celebró en el Ateneo de Madrid la primera jornada digital, en ella se dieron cita los responsables de comunicación y RRSS de los principales partidos para abordar las estrategias que están poniendo en marcha. Representantes como Clara Alonso de Izquierda Unida @klaralonso, Isabel Díaz Ayuso del PP @IdiazAyuso, César J Ramos del PSOE @CesarJRamos, Ricardo Megías de Ciudadanos @RicardoMegias e Iñigo Ybarra de UPyD @inigoybarra.

Una jornada que apuntaba a ser algo único y desde luego muy interesante, resultó una clase de Internet y social media para dummies. Si bien algunos de los asistentes no eran del mundo del marketing on line y la comunicación ciertas aseveraciones que allí se vertieron fueron perogrulladas. Lo cual no es de extrañar dado que muchos de los partidos tienen voluntarios, sí has leído bien, VO - LUN - TA - RIOS al mando de la comunicación y la organización de las redes sociales del partido, tal y como destacaron sus representantes con orgullo. Y es que según palabras de Isabel D Ayuso, representante del Partido Popular, ‘la voluntariedad de querer hacer las cosas bien logra mejores resultados que los que puede alcanzar una empresa privada que no tiene vinculación’. Perdone pero, ¡estamos hablando de profesionales de la comunicación!

Porque lo que es incuestionable es que una agencia de marketing digital sí tiene los conocimientos necesarios, y la capacidad para elaborar propuestas y estrategias en redes sociales acordes al perfil de cada candidato o partido, y por supuesto, para adaptar el mensaje a este medio. Porque no olvidemos que un partido no deja de ser una marca y un candidato un producto de la misma, con sus particularidades. 

Y prueba de la necesidad de criterio son los numerosos casos de nefastas declaraciones o actuaciones en Internet por parte de nuestros políticos. Los ya históricos tweets de Toni Cantó, la puntuación de las partidas de juegos en horarios laboral, insultos, descalificativos, compra de seguidores… Deberían aprender del caso estadounidense de Barack Obama @BarackObama y su mujer Michelle @MichelleObama siempre acertados, cercanos y nunca con los pies fuera del tiesto. ¿Serán sus perfiles sociales gestionados por voluntarios? Me atrevo a apostar que no.

No sé si hacer política es cuestión de tener voluntad, pero hacer las cosas bien en las redes sociales desde luego, requiere algo más que un dispositivo y conexión a Internet.