La realidad virtual se ha instaurado como una tecnología más al servicio de las marcas. Un formato enriquecido que permite crear o recrear experiencias más tangibles, más interactivas, más exclusivas y como es lógico, más reales. Algo muy conveniente, en un entorno cada vez más exigente, en el cual los consumidores demandan vivencias inigualables.
Seguir leyendo >>